نبذة مختصرة : Las enfermedades tropicales desatendidas afectan a más de mil millones de personas en todo el mundo y a más de 55 millones en la Región de las Américas. Pueden causar discapacidad y muerte a largo plazo, y afectan de manera desproporcionada a poblaciones en situación de pobreza. Es sabido que la incorporación de la perspectiva de género y de la interseccionalidad en el desarrollo de los programas de salud puede reducir las inequidades. Con base en esta idea, este artículo sugiere acciones específicas para lograr la incorporación de la perspectiva de género y de la interseccionalidad. Entre estas acciones, se encuentran la recopilación de datos desagregados, la implementación de acciones afirmativas y de comunicación inclusiva, el análisis de género interseccional, el fortalecimiento de capacidades de los profesionales de salud, la gestión de la salud mental y del estigma, y la realización de acciones con enfoque basado en los derechos humanos. Se evalúa que, para alcanzar un cuidado de salud integral, centrado en la persona y en la comunidad, el uso de la perspectiva de género con enfoque interseccional no solo es recomendable, sino esencial. Debe integrarse desde el nivel estratégico hasta el nivel local con la finalidad de comprender y reducir las barreras que enfrentan las personas para acceder a las acciones de salud, considerando los ejes de identidad. Por lo tanto, se debe estimular la participación de la comunidad y dejar capacidades instaladas tanto en los servicios de salud como en las propias comunidades.
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